La libertad religiosa y la libertad de expresión son compatibles
Libertad para criticar el Islam
Libertad para criticar el Islam
ULTIMA HORA (20 de septiembre) Nuestra campaña en Actuall
Una reciente sentencia condena a un conferenciante austríaco por criticar la moral de Mahoma ante un auditorio de apenas 30 personas. ¿Se aplica en Europa la ‘sharia’?, ¿la supuesta “blasfemia” está por encima de la libertad de expresión?
El caso se está estudiando ahora en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo. ¡Podemos apoyar la libertad de expresión!
El Centro Europeo para la Ley y la Justicia (ECLJ por sus siglas en inglés) se ha personado en este caso para defender la libertad de expresión en materia religiosa. Al firmar esta petición nos unimos al escrito presentado por el ECLJ.
La condena austríaca se produjo porque “denigraba a una persona objeto de culto”. Es decir, Mahoma… La sentencia añadía que sus críticas generaban “posibilidades de suscitar indignación”.
¿Qué es exactamente lo que dijo el conferenciante que provocó la condena? El conferenciante –que prefiere permanecer en el anonimato- afirmó que a Mahoma “le gustaba hacerlo con niños”. ¿No se casó con una niña de seis años y consumó el matrimonio cuando su ‘esposa’ cumplió los nueve? El conferenciante añadió su inquietud porque “el mandamiento más importante para un hombre musulmán es imitar a Mahoma”. Concluyó que “el Islam está en conflicto con la democracia y nuestro sistema de valores”.
A pesar de las críticas se basan en hechos que la propia tradición islámica considera probados, las críticas le merecieron una condena de 480 euros o 70 días de cárcel.
Ahora Estrasburgo deberá elegir entre libertad de expresión o represión de la supuesta blasfemia.
El ECLJ lleva más de 10 años combatiendo en Naciones Unidas y en el Consejo de Europa la pretensión de la Conferencia Islámica de imponer el delito de blasfemia –o más bien el “delito de difamación del Islam”- en el derecho internacional.
Para ECLJ, las libertades de expresión y religiosa son complementarias. Solamente los insultos, calumnias, obscenidades y ofensas gratuitas que incitan a la violencia pueden ser restringidas. Pero las críticas, incluso duras, deben ser toleradas, especialmente cuando se trata de hechos reales.
Ninguna religión que aspire a ser la verdadera, derbe tener miedo al debate racional.
Para más información: